Parque Natural del Gorbeia - arabaturismo

Su magia se puede sentir a través de todos los sentidos: contemplar la belleza del paisaje, escuchar el canto de los pájaros, sentir el fluir y balbuceo del agua al caer o subir a sus numerosas cumbres. Entre ellos, el del monte Gorbeia (1.481 m), del que toma nombre este excepcional paraje de 20.016 hectáreas, situado entre Álava y Bizkaia.

Adentrarse en su entorno es descubrir lugares extraordinarios, como el macizo de Itzina (Orozko), impresionante roca caliza de paredes casi verticales; las cuevas de Mairuelegorreta, en el municipio de Zigoitia, con más de 12 kilómetros de galerías se encuentran entre las más profundas de Euskadi; y la preciosa cascada de Goiuri/Gujuli (Urkabustaiz), con un desnivel de más de 100 m.

Sin embargo, si hay algo que define el skyline del Parque es el mítico monte Gorbeia, el pico más alto de Álava y Bizkaia. Es el referente del alpinismo vasco e incluso reivindica una de las canciones vascas más populares. Por eso se hace necesario llegar a la cima, fotografiarse junto a su centenaria cruz de hierro de 18 metros de altura, levantada en 1907 para cumplir la orden del Papa León XIII de erigir cruces en las cumbres más altas de la cristiandad.

La tarea, sin embargo, no fue tan fácil. El que hoy está allí es el tercero, ya que dos tremendos vendavales abatieron tanto al primero, 33 metros, como al segundo, 23 metros.

Si nos detenemos a contemplar el paisaje, podemos observar un terreno calizo con un mosaico de frondosos hayedos, robledales y robledales en uno de los ecosistemas de mayor riqueza biológica de Euskadi. En sus cielos veremos al buitre, el azor y el gavilán; y en sus bosques sentiremos la presencia de la garduña o el gato montés, aunque lo más probable es que nos encontremos con el mayor de sus habitantes y emblema del Parque, el ciervo.

En sus riachuelos se esconden escurridizos ejemplares de nutria y desmán pirenaico, compartiendo hábitat con una gran variedad de anfibios, como la rana ibérica o el tritón alpino, ambas especies en peligro de extinción.

Un elemento esencial del paisaje son las extensas dehesas que, durante miles de años, han alimentado el ganado y una cultura pastoril, consigna de Gorbeia: razas autóctonas de caballos, vacas y ovejas, como la oveja latxa, la bovina terreña y pirenaica, Pottok ponis o cabras Azpi Gorri, que se han convertido en las auténticas guardianas y dueñas de los pastos del parque.

Aún se pueden contemplar rediles y cabañas de pastores junto a restos de otras actividades en la zona, gracias al equilibrio entre el medio humano y el natural que ha permitido conservar este destacado patrimonio cultural: monumentos megalíticos o antiguos hornos de cal que, junto con con mitos y leyendas supervivientes, jalonan el cuerpo y el alma de este mágico entorno.

Por eso, descubrir Gorbeia pasa por disfrutar de sus leyendas, su arte, su gastronomía, su entorno rural y sus tradiciones.

Las preferencias personales harán que el visitante se decante por los museos, la naturaleza, el patrimonio o el senderismo, pero para empezar a disfrutar del Parque lo mejor es empezar por la Casa del Parque de Sarria o Parketxea.

Localización

A tan solo 20 minutos de Bilbao y Vitoria-Gasteiz tienes a tu disposición un paraíso para los sentidos que ofrece naturaleza, tradición, gastronomía y ocio en estado puro. Desde 2010, la Asociación de Desarrollo Rural de Gorbeialdea y la Cuadrilla de Gorbeialdea colaboran para promover el turismo en la zona de Gorbeia.

El Parque Natural de Gorbeia se divide entre Álava y Bizkaia, y tiene diferentes accesos. Uno de ellos es la Casa del Parque de Sarria, cerca del pueblo de Sarria.